Sunburned

Esta noche vengo dispuesto a escribir hasta que los dedos me obliguen a dirigirme a la cama. He estado pensando sobre qué quiero escribir, sobre porqué muchas veces me siento aquí y suelto nimiedades sin mucha importancia cuando a lo largo del día me pasan millones de cosas por la cabeza. Y no sé si es definitivo, pero hoy tengo el "talante" polémico. Nótense las comillas.

Pese a todo no quiero tampoco emplearme con dureza desde el principio. Traigo una recomendación cinematográfica: 21 grams. Película de Benicio del Toro y de Sean Penn. No ha sido impactante en cuanto al contenido pero si en la forma. Es una intercalación de escenas mezcladas en el tiempo de una manera tan brutal que roza el desconcierto para el que está sentado en el sofá, pero que a la vez deja una esencia de obra maestra. Sobre el contenido no quiero comentar nada puesto que alguien que me lea puede no haberla visto, la tipica situacion de accidente con excarcelarios y adictas a la zarpa.

Los que me conocen saben que estoy de vacaciones en Miami, visitando a mi madre un par de semanas (y los que no son "de la familia" ahora ya lo saben); y eso unido a que Junio ha sido un mes de examenes bastante ajetreado me ha obligado a informarme en versiones digitales de los diarios de la actualidad. Los periodicos dan practicamente todas las noticias relevantes en estos foros, pero no hacen lo mismo con los artículos de opinión, que usualmente suelo leer.
Aquí está el motivo por el que yo desconocía un resbalón con golpe en la nuca con el bordillo de uno de los estandartes vivos más importantes de la literatura española (soy así de duro no por un arranque violento, sino por expresar metafóricamente el hecho de que nunca volveré a ver a tipo semejante de la forma en que hasta hoy lo hacía). Antonio Gala ha insultado a muchisimas personas que apoyamos la concentración del 10 de junio en la plaza de Colón de Madrid, entre las cuales se encontraban padres, madres, mujeres, hijos, hijas, sobrinos y demás relativos de ciudadanos asesinados por ETA. Ha dicho textualmente que Lo peor de vociferar y agitar banderas es no saber de verdad qué se quiere. Toda paz tiene un precio y toda negociación hacia ella, un tiempo y un sigilo.
Reconozco la burrez de un gran porcentaje de los que nos encontrábamos allí. Pocos, o tal vez ninguno teníamos tres doctorados, ni el cociente intelectual comparable con su inteligencia. Pero creo que sí se sabía lo que se hacía. La paz que queremos, el cese del continuo atropello de los españoles de la calle, ya tiene su precio. Ése es el de las personas muertas, sean del PP, PSOE, rubios, morenos o castaños. Y se quiere que España deje de ser insultada, se ondean sus banderas porque sí, porque ese derecho existe, y porque no nos podemos avergonzar, y menos que pretendan intentar que nos avergoncemos.
Gala recibió una respuesta a su altura, de una hermana del edil popular asesinado en Sevilla junto a su mujer hace unos años, en forma de carta abierta. Él volvió a tener la desvegüenza de seguir en la lína pro-etarra afirmando que los asesinos de Miguel Ángel Blanco Garrido son unos rebeldes dentro de la organización, unos empecinados en quebrantar la "paz". Curiosamente cuando a este pobre hombre lo secuestraron, las pretensiones de la banda, eran las mismas que hoy batasuna exige. ¿Era necesario esperar a que mataran a tantos españoles? Perdón por la prepotencia, pero, ¿he hecho un razonamiento demasiado simplista de aeronáutico o es usted el que es tonto de rebote?¿Deberíamos haber aceptado todas las peticiones en 1975?, o ¿porqué no dar derechos historicos a todos los pueblos?
Encuentro serio problema en dónde establecer la barrera histórica. Me explico. Euskadi, antes de la ocupación española, eran un pueblo libre e independiente. Pero tambíen lo eran todos los pueblos peninsulares por aquél entonces. Se me ocurre que deberíamos llamar al colega Prodi, explicar que llevamos en tregua unos cuantos siglos y pedir indemnización por la opresión y la imposición de una lengua que no debe de servir para nada.Tantos millones de hispanohablantes en todo el mundo deberíamos echar la culpa inicial a Italia. Desgraciados!
Yo por mi parte quiero la realización de un Estado para el pueblo celta, aunque realmente no se si alguién vivía ahí antes. Es una historia el intentar averiguarlo, tendré derechos históricos?
Eureka! los novascos no tenemos un ADN tan privilegiado como los compatriotas de Arzallus, por eso somos inferiores! Desde luego voy a tener que desdecirme de todo lo que descalifique a A.Gala anteriormente. Es imposible que no me haya dado cuenta de estas cosas hasta ahora. El tonto soy yo!
Por otra parte los de Oviedo creen que son mejores que los de Gijón, y los de Avilés ya ni te cuento, con lo cuál los culomoyaos y "los de Avilés" (son tan inferiores que no tienen ni mote) deberían limpiar la deuda de las gabinonas ovetenses, y además darnos 20 euros a cada adolescente extras para fines de semana.
Con esta capacidad si me acerco al grupo PRISA me hacen presidente del gobierno, que esperanzadora rebelación!

y es que me río por no llorar. Me encantaría ser progre, pero es que no entiendo su forma de pensar las cosas. ¿lo hacen?, no tengo ni la más mínima idea. Hoy he escrito más de la cuenta sobre A. Gala.
Tengo preparado un monólogo dedicado a las feministas pro-arafat de chuparse los dedos.

Para despedirme me gustaría soltar unas preguntas, y si alguien me lee, y tiene la ocasión de responderlas, las leeré y responderé en días próximos (responder en realidad lo voy a hacer de cualquier forma, pero me gusta q la gente escriba): ¿tenemos libertad de expresión en España?, ¿el cristianismo es tan repugnante al lado del islam?; si ondear la bandera constitucional es facha como mucha gente cree ¿es fascista todo ciudadano que votó en referendum la constitución de 1975?; ¿alguién sabe lo que es el CAC y a qué se dedica?

Nowitzki.

P.D.: me siento agotado ahora mismo, menos mal que tengo la "suerte" de ver a Johnny Knoxville conduciendo su precioso Porsche Cayman por la US 1.
Recomiendo encarecidamente el libro que estoy leyendo ahora, es muy revelador: "confesiones de un diplomático" de Inocencio Arias.
Y además tengo un moreno que cuando me veáis a la vuelta os váis a quedar locos.